Una buena nutrición es el fundamento para una buena salud. El alimento puede ser utilizado como medicina porque su verdadero propósito es brindar información al cuerpo para que sirva de la manera que fue diseñado a funcionar. Hoy en día el enfoque más actual en el campo médico, es utilizar el alimento como medicina; sin embargo, este no es un concepto nuevo. Hipócrates dijo “Deja que el alimento sea tu medicina y que tu medicina sea el alimento” , esta cita sirve en la actualidad como una inspiración para el movimiento de “alimento como medicina” o la medicina nutricional.
Muchos de los campos de la medicina antigua, incluyendo el de Ayurveda y Chino, se han concentrado desde hace miles de años en utilizar los alimentos para propósitos medicinales. Usar remedios caseros para sanar cuestiones de salud es una práctica común en muchas partes del mundo.
La raíz de enfermedades más común es la inflamación crónica. Una dieta deficiente, estrés y permeabilidad intestinal en conjunto, son causantes de inflamación crónica y la dieta de tiempos modernos es la gran culpable del incremento en enfermedades crónicas. La dieta estándar americana (“SAD” por su siglas en inglés) carece severamente de nutrientes y está repleta de comidas procesadas, azúcares, colorantes y aditivos. La persona Americana promedio consume alrededor de 22 cucharaditas de azúcar diarias, esto es 88 gramos o ½ taza de azúcar, diariamente. Como nación Estadounidense, las personas se han convertido en humanos mal nutridos, enfermos y saturados de comidas que carecen enormemente de información esencial que se necesita para funcionar apropiadamente.
Es tiempo de enfocarnos en cambiar el combustible que le proporcionamos a nuestro cuerpo. Alimentarnos con una dieta más saludable rica en fitonutrientes, antioxidantes, fibra y grasas de alta calidad, puede ayudar a reducir inflamación, mantener estables los niveles de azúcar en la sangre y aumentar la función del sistema inmune. El 70% de nuestro sistema inmune está en el intestino – todo aquello que comemos se vuelve extremadamente importante para apoyar su función.
Nuestro microbioma (bacterias intestinales) lleva un papel muy importante en nuestra salud. Lo que comemos afecta nuestro microbioma; lo que puede incrementar o reducir la inflamación en el cuerpo. Comer una dieta abundante en plantas con un mínimo de comidas procesadas alimenta la bacteria saludable de nuestro intestino, así provee protección contra enfermedades crónicas. Un plan de alimentación saludable está directamente relacionado a cómo nuestros genes se expresan.
Nutrigenómica es la ciencia que se concentra en cómo la nutrición impacta a nuestros genes. La dieta balanceada puede llegar a proteger a nuestros genes y los activa y desactiva. Los alimentos brindan información a la mente y a todo el cuerpo; son el mensajero bioquímico de todo nuestro sistema y lo que comemos impacta el mensaje positivo que lleva a nuestros genes.
La calidad de los alimentos que consumimos es sumamente importante, así como la cantidad. El uso de pesticidas, hormonas y químicos así como las comidas genéticamente modificadas a ido incrementando en los últimos 20 años. Muchos de estos químicos por naturaleza causan inflamación y son disruptores endocrinos que pueden llegar a causar un desbalance en los sistemas del cuerpo y por lo tanto es extremadamente importante poner atención en la calidad de los productos que compramos para llevar a nuestros hogares, desde cómo se plantan, producen y preparan.
Las investigaciones acerca de este tema consideran que el tipo de comida que se consume es importante no solamente para la salud física, sino también influencia la salud mental y anímica de cada individuo. Las frutas frescas y los vegetales son ricos en compuestos como antioxidantes y fitoquímicos, que protegen nuestro estado de ánimo y el cerebro. Una dieta balanceada rica en vegetales, frutas y grasas saludables es extremadamente importante para una buena salud mental.
Los alimentos nutren nuestro cuerpo, mente y alma. Además de concentrarnos en lo que comemos es importante poner atención a cómo y cuándo consumimos nuestras comidas y cómo las preparamos. Debemos reconocer y respetar nuestra bio individualidad. Cada uno de nosotros es único en las necesidades de nuestro cuerpo, preferencias en alimentos y culturas. Hacer cambios pequeños y graduales es importante, ya que es lo que nos dará beneficios de salud duraderos.
10 guías para utilizar los alimentos como medicina:
Podría ser que de alguna forma, al cuidar lo que comemos, nos convertimos en los guardianes de nuestra salud. Conocemos cada vez mejor a nuestro cuerpo y lo llenamos de información positiva, ayudando a sanar y a mantenerse sano, todo a través de los alimentos.
“El doctor del futuro ya no tratará el cuerpo humano con medicamentos, más bien curará y prevendrá las enfermedades con la nutrición.”
-Thomas Alba Edison.